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Crímenes cometidos por Santa Claus

Es el protagonista de la navidad desde tiempos remotos, ha sido imitado y representado por millones de personas alrededor del mundo.

Un viejo bonachón, regordete, barbón, de traje rojo, guantes blancos y enormes botas negras, su transporte es un trineo jalado por renos.

Su trabajo, llegar cada navidad a todas las casas del mundo para entregar obsequios a quienes se portaron bien y le escribieron una carta, pero si te portaste mal, encontrarás un pedazo de carbón.

Así es, hablamos de Santa Claus, Papá Noel o San Nicolás, un personaje amado por los niños. Un personaje que transmite paz, bondad, predica con el amor y mantiene viva la magia de la navidad.

Pero… ¿Qué pensarías si el que se metió por tu chimenea no es un hombre bondadoso y en su lugar entró un asesino desalmado?

Hoy te contaremos, algunos de los crímenes que convirtieron a Santa en un delincuente.


Mercadillos navideños de droga en Berlín

Cada año turistas y lugareños acuden a Berlín para disfrutar de los mejores mercados navideños del mundo. En 2011, hubo un giro siniestro, ya que un hombre vestido como Papá Noel drogó a más de una docena de miembros confiados del público en general.

Apodado como el "Schnapps Spiker", se acercaba a la gente en un estado de ánimo optimista, afirmando que se había convertido en padre y por lo tanto, ofrecía bebidas gratis, las cuales estaban llenas de éxtasis líquido. Poco después de la ingestión, provoca vómitos, mareos y, en muchos casos, pérdida de conciencia.

Charles Blume, ofreció una recompensa de 1.000 € para cualquier persona que capture a Schnapps Spiker, diciendo: "Este comportamiento sucio y cobarde debe ser detenido".


Santa responde cartas con insultos

Cada año, Canada Post ejecuta un programa donde los niños pueden escribir una carta a Santa Claus y recibir una respuesta personalizada. Para el 2007, se escribieron más de 15 millones de cartas. Sin embargo, lo que sucedió durante esa temporada navideña de ese año fue totalmente calculado y bastante malicioso.

Diez niños desafortunados recibieron respuestas de Papá Noel que fueron atadas con mensajes tales como: "Esta carta es demasiado larga, tonto". Y "Tu madre apesta y tu padre es gay".

En respuesta al escándalo, Canada Post emitió una declaración que indicaba que estaban haciendo todo lo posible para localizar al culpable, a quien creían que era "un elfo pícaro". Resultó que fue un grupo de menores los que obtuvieron acceso. A los montículos de letras festivas.


Santa roba un helicóptero

El 27 de noviembre de 2015 durante la temporada de compras navideñas, un hombre vestido de Santa llegó al aeropuerto de Campo de Marte en Sao Paolo, Brasil, buscando un helicóptero para crear una sorpresa.

El piloto se sorprendió de manera abrumadora cuando su cliente sacó un arma y le indicó que volara a una granja. Allí, el secuestrador se reunió con un cómplice, y el dúo procedió a atar al piloto para luego darse a la fuga.

El piloto tardó varias horas en liberarse, momento en el que se informó a la policía del secuestro. El helicóptero y sus dos ocupantes aparentemente desaparecieron en el aire.


Santa mata por chocolates

El 10 de diciembre de 2004 en Atlanta, Elkin Clarke, disfrazado de Papá Noel, vendía cajas de chocolates. Según Clarke, estaba aguantando a un cliente del infierno y afirmó "ella me estaba robando mis cosas. Le pedí varias veces que no tocara mis cosas”.

Según su versión, la anciana le quitó 29 cajas de dulces, por un valor de $145. Sin embargo, no hubo evidencia de su robo.

Testigos cuentan que Clarke estaba drogado y con una tabla golpeó a la mujer en la cabeza. Dos estudiantes intentaron proteger a la víctima. Pero Clarke la golpeó dos veces más mientras yacía en el suelo.

Un mes después, la mujer murió a causa de sus heridas. Clarke intentó que se redujeran sus cargos debido a que la mujer, que tenía 74 años, murió debido a problemas de salud subyacentes. Su apelación no tuvo éxito.


Santa pelea con un adolescente

En diciembre de 2000, durante una exhibición navideña titulada "Santa Sails In", celebrada en Great Yarmouth, Inglaterra, un hombre de 35 años vestido como Santa se peleó con un adolescente.

Una multitud de niños confundidos, estalló en lágrimas cuando Santa fue esposado.

Afortunadamente en el evento había un Papá Noel principal montado en un trineo, que ayudó a explicar a los niños lo que pasaba.

Por su parte, la policía llevó a algunos de los niños más traumatizados a la estación para demostrar que arrestaron a un farsante.

El falso Papá Noel recibió una advertencia de la policía y posteriormente fue liberado en la comunidad.


Masacre de Covina

En Covina, un suburbio de Los Ángeles, en la víspera de Navidad de 2008, Bruce Jeffrey Pardo salió a matar. Los objetivos de su ira eran su ex esposa y su familia, que se habían enterado de la finalización de su divorcio una semana antes.

Pardo llamó a la puerta de la casa de sus ex suegros con el atuendo completo de Santa. En sus manos llevaba un regalo envuelto, que contenía varias armas. Cuando la hija de su ex cuñada se le acercó alegremente, le disparó en la cara. Ella sobrevivió.

La mayoría parece haber muerto por heridas de bala, ya que Pardo roció de inmediato a la multitud de 25 personas con balas de pistolas semiautomáticas. La víctima más joven tenía 17 años y se confirmó que había muerto en un incendio. Pardo comenzó con un lanzallamas casero.

En posesión de Pardo había $17,000 en efectivo y un boleto de avión a Canadá, por lo que supuestamente tenía la intención de escapar.

Pardo luego se dirigió a la casa de su hermano, donde se disparó a sí mismo. Se había quitado el traje de Santa y lo había dejado en su automóvil, tenía trampas explosivas para provocar una explosión cuando se inspeccionaba. Aunque su bomba improvisada funcionó, nadie resultó herido.


El Santa jardinero

Bruce McArthur un hombre de 67 años, trabajaba como jardinero, y en temporada navideña personificaba a Santa Claus dentro de un centro comercial en su ciudad, Canadá.

Su apariencia le ayudaba a complementar su vestuario, pues era de tez colorada y cabello blanco.

Sin embargo, detrás del personaje inocente que convivía con niños a diario, se escondía un completo asesino serial.

Entre los años 2010 y 2017, Bruce acabó con la vida de ocho hombres y escondió sus cuerpos descuartizados dentro de enormes macetas.

Y es que Bruce usaba un espacio en la propiedad de los esposos, Karen Fraser y Ron Smith, para guardar su utilería de jardinería. A cambio, les cortaba el césped periódicamente.

Todos los hombres a los que atacaba eran homosexuales y residentes de Toronto. Los contactaba por medio de una aplicación de citas hasta encontrarlos para matarlos.

Antes de cometer el crimen, los fotografiaba. Además, el asesino buscaba a inmigrantes sin familia o personas que mantuvieran su sexualidad en secreto.

El día de su detención, se encontró a una novena víctima, en su cama, quien estuvo a punto de ser el próximo cuerpo a enterrar en sus macetas.

En 2019 el "Santa asesino" se declaró culpable de ocho cargos de asesinato en primer grado tras comparecer en un tribunal de la ciudad.

McArthur documentó cada uno de sus crímenes. La policía encontró carpetas clasificadas con imágenes de cada víctima.

El asesino recibió ocho cadenas perpetuas, sin derecho a libertad condicional hasta cumplir 25 años de condena. Por lo que todo parece indicar que el "Santa asesino" morirá en prisión.

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