top of page

El lado oscuro del embarazo


Nadie discute que es una experiencia increíble, puede ser lo más hermoso que le puede pasar a una mujer, pero también puede ser un momento de sufrimiento y angustia.

Ser madre es un gran poder y como dijo el tío Ben, esto es una gran responsabilidad. Si nos basamos completamente en las historias de nuestras abuelas, que llegaban a tener más de 5 hijos, o incluso nuestras propias madres, seguramente pensaríamos que el embarazo es lo más fácil del proceso.

Pero tomemos en cuenta que un embarazo cambia tu anatomía y el funcionamiento de tu cuerpo para darle paso al nuevo ser, muchas operaciones del cuerpo cambian constantemente.

Es por esto por lo que es importante conocer tanto las cosas buenas de un embarazo como también los puntos negativos, lo que da miedo, los riesgos. El panorama completo te puede dar claridad a la hora de decidir convertirte en mamá.


La cuestión psicológica

No solo tu cuerpo comenzará a cambiar en el momento en el que se presenta un embarazo, también lo hará tu mente. Las fluctuaciones hormonales podrían hacer estragos en ti.

Los cambios de ánimo son bastante comunes durante los meses de gestación, algo similar a los presentes durante el ciclo menstrual pero como que potencializados, si los quieres ver de esa forma.

Habrá mucho que asimilar y, por tanto, deberías ser más comprensiva contigo misma y tener paciencia para acostumbrarte a la situación, incluso llegarás a exagerar diversas situaciones.

Un acompañamiento psicológico puede ser crucial para el buen desarrollo de tu mente durante el embarazo.

Toma en cuenta que estarás cansada todo el tiempo y no es para menos, estarás creando a una persona completa, esto supone un esfuerzo físico mayúsculo que consumirá toda tu energía.


La cuestión superficial

Todas las personas tenemos cierto grado de superficialidad, si bien es cierto que algunas tienen más tendencia a los juicios externos, la mayoría nos juzgamos a nosotros mismo cuando nos vemos en el espejo.

¡Ojo! No digo que esté bien o mal, simplemente es normal ver nuestro reflejo y pensar que hay algo de nuestro cuerpo que no nos gusta del todo.

Amarte a ti mismo no significa que no puedas verte y aceptar lo que tienes, te guste o no, y si es la segunda siempre se puede hacer algo al respecto.

Peeeeeeeeeeeero cuando sucede un embarazo, difícilmente podrás controlar como se ve tu cuerpo, inevitablemente te verás diferente y te sentirás diferente.

Puedes amar cómo te ves embarazada o puedes odiarlo, y poco podrás hacer para cambiarlo, el bebé necesita espacio. Además de luchar contigo misma sobre tu aspecto, deberás hacerlo también en contra de una sociedad que se rige bajo cánones de belleza horribles.

Probablemente te toparás con uno u otro comentario desagradable al respecto, deberás ser fuerte y manejar estas emociones negativas.

Además, dependiendo del tipo de régimen que quieras llevar, quizás debas cuidar tu alimentación, lo que significa: renunciar a chuches o platillos en específico que no podrás consumir.

Por ejemplo, ¿estás lista para dejar de tomar café?


El parto

Ahora sí, ha llegado el momento del parto. Seguramente el momento más aterrador de todo el proceso. Aquí es cuando me vuelvo un poco sádica, te describiré todo lo que puede salir mal en el parto.

Hey que no te me achicopales, este artículo es precisamente para conozcas las dos versiones, tanto lo que puede salir bien, hasta lo peor que puede suceder.

Durante todo tu embarazo tendrás citas médicas de revisión en las que se asegurarán de que todo vaya bien y tanto tu bebé y tú estén sanos y salvos.

Sin embargo, hay situaciones que pueden darse en el momento de dar a luz, las mas comunes son las siguientes:

  • Desgarros perineales: A veces, es probable que la vagina y los tejidos a su alrededor se rasguen durante el parto. Estos generalmente sanan solos, pero si llegan a ser más graves, seguramente necesitarás sutura. Alargando la recuperación.

  • Sangrado excesivo: Durante un desgarro o si el útero no se contrae como debería, se puede producir un sangrado abundante.

  • Parto prolongado: Normalmente un parto dura entre 14 y 20 horas, hay ocasiones en las que estos se alargan demasiado, dando pie a infecciones, deshidratación y sufrimiento fetal.

  • Hipertensión: Aún si no sufres de este padecimiento antes del embarazo, durante el parto puedes desarrollarla muy rápido debido al gran esfuerzo del cuerpo. La preecalmpsia es muy común, puede provocar niveles altos de proteína en la orina y dañar los riñones. En ocasiones puede provocar la muerte de la madre.


Ahora respira y tranquila

Este es el momento en el que sueltas el aire y comienzas a respirar con normalidad. Si bien es cierto que todo proceso médico es riesgoso, las estadísticas nos dicen que los riesgos en partos son cada vez menores.

Si decides convertirte en madre, es mucho mejor estar informada de todo lo que le pasará a tu cuerpo y preparar tu mente puede hacer el proceso más fácil.

Lo importante es que no tengas miedo de pedir ayuda, acude con terapistas, psicólogos y médicos que te ayuden a pasar por todos los cambios saludablemente.

Cuídate y cuida a tu futuro bebé.

Nos leemos pronto <3

6 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page