Jefe vs Líder
Dentro de una empresa existe una jerarquía, por supuesto, encabezada por el dueño o el director general de la misma. Y mientras bajamos en el organigrama nos podemos dar cuenta de que hay personas que son el jefe de otras.
Una persona es la encargada de la dirección de otras y la gestión de un equipo, pero no siempre sale bien. Por más capaz que sea un profesionista para desempeñar este rol, no siempre sale de la mejor manera.
¿Qué es un jefe?
Según la Real Academia Española, un jefe es una persona superior o cabeza de una corporación. OSEASE es aquel que impondrá órdenes y se pondrá a mandar a diestra y siniestra.
Por supuesto supervisando que todo se haga correctamente y a tiempo.
¿Qué es un líder?
Nuevamente, la RAE define a un líder como la persona que dirige o conduce un partido político, grupo social u otra colectividad. Esto nos dice que, de entrada, el líder buscará ganarse la confianza de sus equipos, sin imponer.
¿Qué dice la cultura popular?
Todas las empresas alegan que tienen a puro líder trabajando en sus filas, pero la realidad es que los que saben si esto es cierto o no, son los empleados.
Las personas que no están a cargo de nadie, el trabajador, el obrero, dirían por ahí.
Porque somos quienes, a fin de cuentas, sufrimos las decisiones, los tratos y el humor de nuestro jefe. Y es aquí cuando nos damos cuenta de que, en realidad, lo que abundan, son los jefes, no los líderes.
Un jefe influye, por supuesto, pero lo hace siendo un reflejo y con un respaldo de una autoridad mayor, por lo que, terminan ocasionando desconfianza y temor entre sus colaboradores, no inspira ánimo, ni simpatía.
Por otro lado, el líder siempre buscará la motivación y el ánimo con su influencia. Harán uso de su simpatía, no necesita imponerse sino convencer a los demás.
¿Por qué odiamos a los jefes? Bueno, entre los que somos Godínez es bien conocido que ninguna empresa es perfecta y todas tendrán su manera de cuidar a sus trabajadores.
El tema se pone caótico cuando entran en juego los jefes que solo se preocupan por verse bien ante los directivos, sin realmente involucrarse en el trabajo.
Los logros obtenidos del equipo le pertenecen solo al jefe, sin atribuir a nadie más el éxito, incluso se verá intimidado si alguno de sus comandos progresa o destaca demasiado, llegando incluso a sabotearlo.
Por su parte, el líder comparte y festeja en conjunto con todo el equipo, recalcando el esfuerzo de cada quien y en caso de que se hayan cometido errores, asume las responsabilidades sin culpar a otros.
Probablemente jamás nos libremos de los molestos jefes, pero podemos sembrar en nosotros mismos la semilla del líder, de esta forma, poco a poco, lograremos llegar alto y evitar ser aquellos que odiamos tanto.
Aquí te dejo algunos videos donde se retrata, de manera cómica, lo que es un jefe.
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¿En tu trabajo hay jefes o líderes? Cuéntanos en los comentarios.