¿Por qué creemos en la astrología?
Los horóscopos se han convertido en parte importante de la vida, no para todos, pero al menos si en la mayoría, pues aseguran que “saben” todo sobre sus próximos proyectos, amores y demás.
Aunque existe desde hace siglos en países como India y China, recientemente han ganado mayor trascendencia en Occidente, tal es el punto que se han creado desde aplicaciones sobre el zodiaco y memes diarios, hasta astrólogos influyentes y artículos sobre cómo vestirse o cuidarse de acuerdo a tu signo.
La historia

Aunque no existen datos certeros sobre su origen, hay algunas teorías. Una de las más recurrentes es que la astrología se originó en Babilonia hace más de 5 mil años, ya que los babilonios eran observadores de estrellas y hacia conexiones entre lo que pasaba en el cielo y la Tierra, o sea, lo hacían para “encontrarle sentido al mundo”.
El primer testimonio de esta creencia es el libro “Enuma Anu Enlil”, donde se encuentran los primeros intentos de interpretación de los eventos celestes en cuatro grandes categorías, cada una vinculada a la divinidad.
Pasó el tiempo y diferentes culturas alrededor del mundo también comenzaron a practicar la astrología, ya saben, mirar al cielo para intentar darle sentido a lo que sucedía en el plano terrenal.
Dentro de la cultura griega, Ptolomeo fue el responsable de popularizar la idea de los 12 signos zodiacales y las características de cada uno, así como la relación con los elementos agua, tierra, aire y fuego.
Para 1995 surgió la teoría que asegura que los signos zodiacales no deberían ser 12, sino 13, situación que llevaría a que se cambien las fechas a como las conocemos ahora, sin embargo, nunca se ha tomado en cuenta el descubrimiento.
Ahora sí… ¿por qué creemos?
La neuropsicóloga Frine Torres, asegura que al inicio parece ser algo universal que tiene que ver con la incapacidad que tenemos los humanos de vivir en la incertidumbre, sin embargo, hay una explicación.

A nivel psicológico existen dos fenómenos que pueden explicar el por qué pasa, uno de ellos es el Efecto Forer, que también es conocido como “Efecto Barnum”.
En este se describe un comportamiento muy curioso, pues las personas solemos aceptar descripciones de nuestra personalidad –como las que leemos en los horóscopos y signos- aunque sean muy ambiguas, genéricas y vagas.
Las descripciones se pueden aplicar a cualquier persona, pero nuestro cerebro nos lleva a creer que están especialmente dirigidas a cada uno.
“Tu carta astral, por ejemplo, es específica, eres tú en el universo, entonces parece que esa información es solo para ti y las cosas que te dice, por el Efecto Forer, te harán sentido”, explica la doctora Torres.
Al segundo fenómeno lo llaman “confirmación del sesgo”, que no provoca más que enfocarnos en las características que si compartimos e ignoremos las que no.
Lo que nos lleva a que, si encontramos una descripción de nuestra personalidad, naturalmente pondremos más atención en los elementos que si van con nosotros, es una especie de confirmación de lo que CREEMOS QUE SOMOS.
Por otro lado, hay quienes definen y describen a la astrología como una herramienta de planeación y conocimiento para entendernos a nosotros mismos y lo que nos rodea, pero sin tener que ver con la fe o adivinación.

¡Pero tranqui!
La doctora Torres asegura que todo está bien cuando consultas tu signo como parte de tu rutina, te haces bien y eres funcional, pero el grave problema es cuando necesitas recurrir a esta práctica para tomar decisiones importantes, ya sea para llevarlas a cabo o no.
Está bien si crees en los signos zodiacales, no tienen nada de malo, es divertido y curioso. Pero hay un límite y tenemos que aprender a ponerlo, porque si no nos pasa como la historia de Taciano Santos, quien conoció a alguien por una app de citas, todo iba taaaan bien, hasta que hablaron de sus signos zodiacales, él le dijo que era géminis y lo borraron de WhastApp.
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¿Te imaginas que todo se rigiera bajo el argumento de “si eres *tu signo* no puedes o debes hacer esto”? ¡Patético y horrible!
Déjanos saber tu signo y te decimos qué tipo de taco eres<3
¡Nos leemos luego!