Un trato con el Rey de los Elfos
Imagina que el mundo está dividido y dominado por los elfos, una franja invisible pero poderosa separa ambos, el mágico y el humano. Gobernados por un rey, uno que es frío, calculador y lo único que busca es tener una reina humana.
En el mundo de Luella, nuestra protagonista, esto es una realidad. Ella vive en Capton, un pequeño pueblo costero al borde del vano, una franja poderosa que divide su mundo con Midscape, donde viven todas las criaturas mágicas.
¿De qué trata?
Los elfos y todas las criaturas mágicas viven en Midscape pero son gobernados por Eldas, un elfo que ha sido criado para ser el rey de todo ese lugar y del mundo natural (humano).
Cada 100 años -aproximadamente- el rey y la reina mueren, por lo que el heredero se convierte en el nuevo gobernante y el poder y magia de la reina pasan a una chica humana.
Ella deberá casarse con el rey y juntos mantener el equilibrio de la magia en el mundo.
¿Funciona?
Por supuesto que sí. El libro es casi perfecto, digamos que se queda en una calificación de 9.8.
En las páginas nos presentan a Luella, una chica que ha estudiado herbología toda su vida porque desea convertirse en la única curandera de su pueblo y es bastante buena en ello.
Ella sabe que la visita del rey de los elfos está a un par de días y se preocupa por sus pacientes, ya que normalmente, la reina humana es detectada desde que es una adolescente.
Ese año no ha habido una reina humana, no saben quién es y la visita del rey puede suponer un peligro para el pueblo y para los pacientes de Luella.
Por supuesto, ella es descubierta como la reina humana y el rey Eldas descubre que alguien ha estado ocultando la magia de Luella para impedir que la chica se fuera a Midscape.
A partir de aquí comenzamos toda una aventura de autoconocimiento, Luella tiene sueños que repentinamente se han visto truncados, sin embargo, al ser su destino ser la reina, todo parece encajar de alguna manera y por lo tanto, tiene sentimientos encontrados.
Eldas por su parte, ha sido entrenado para ser rey desde su nacimiento y ahora debe convertirse en un mentor y una niñera para Luella, su esposa, quién no tiene ni idea de cuál es su papel.
Ambos se mantendrán en un ir y venir de sus propias responsabilidades como gobernantes, lo que quieren para su propias vidas y lo que por supuesto, van sintiendo el uno por el otro.
El libro está perfectamente construido, al ser una historia única, debe abarcar todos los detalles en un solo libro y la autora lo hace extraordinariamente.
Los detalles del mundo en el que los personajes viven te dan la sensación de percibir lo mismo que ellos. No pierde tiempo en historias profundas sobre los personajes secundarios porque no es necesario.
Lo único que siento flojo es el romance entre Luella y Eldas, sus personalidades chocan, claro, es el objetivo del libro. Pero están tan bien marcadas que cuando comienzan su romance se siente raro, quizás un poco increíble.
Dense la oportunidad de este libro, no se arrepentirán.
Calificación
⭐⭐⭐⭐⭐